Y así fue como empezamos a pintar abanicos.
Si tuviera que decir quienes somos pues lo resumiría en pocas palabras, "somos tres miembros de una familia apostando alto por lo que uno hace".
Todos los comienzos son difíciles pero para nosotros al principio el viento nos vino de cara.
Estos somos nosotros, los adultos del grupo. La tercera persona que no sale es menor de edad pero no por ello menos importante.
Empezamos con alguna tienda en el año 2011 las cuales apostaron por nuestras cosas y desde aquí queremos aprovechar para agradecérselo.
Luego nos apuntamos a un mercado de verano y un par de ferias que ahora se han convertido en nuestro punto de encuentro con clientas que ya nos conocen y nos buscan para ver si tenemos algo nuevo.
Estos fueron nuestros comienzos. La primera feria la cual la hicimos asustados sin saber como sería. Desde aquel día mucho ha cambiado todo.
Ampliamos nuestra mesa, nuestro espacio y nuestra confianza.
Desde entonces se siguen conservando tiendas como cliente y hemos hecho eventos de bodas, comuniones y bautizos en los cuales se han dado nuestros abanicos como regalo.
Seguimos haciendo nuestras dos ferias fetiche y hemos ampliado el recorrido en el mapa.
Nos hemos embarcado en hacer bolsos de los cuales buscamos telas fuera y hacemos como mucho 2 unidades de cada con el propósito de no saturar a nadie y no aburrirnos ya que no nos gusta ver mucho de lo mismo.
En el invierno del 2012 probamos hacer detalles de regalo cosidos a mano y bisutería con la misma política de producir poca cantidad de un modelo. Y hasta el momento nos funciona.
A día de hoy nuestra habitación de invitados a pasado a ser nuestro atelier (como lo llama nuestra incondicional mejor relaciones públicas T.O.A. ella ya sabe quien es) y hemos conseguido estar ocupados en las dos principales estaciones del año Verano e Invierno.
En el camino hemos dejado cosas pero también hemos ganado.
Hasta ahora el balance es positivo
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